Ahora que ya lo sabes

Opinión:

Oriol Pamies no necesita presentación: es emprendedor y uno de los activistas por los derechos LGBTQ+ más reconocidos de nuestro país. Ha trabajado durante años en torno a la tecnología, el marketing y el turismo, y ha dado charlas y conferencias asesorando a empresas sobre temática queer. En efecto, si alguien podía escribir un libro como "Ahora que ya lo sabes", solo podía ser él. Se trata de un ensayo sencillo que servirá de guía para todos aquellos que empiecen a cuestionar o redefinir su sexualidad o su pertenencia (o no) a los modelos heteronormativos.

Tras un emotivo prólogo del youtuber colombiano Juan Pablo Jaramillo, "Ahora que ya lo sabes" se inicia con un primer capítulo dedicado a repasar la experiencia personal de quien aún no tiene clara su sexualidad. A continuación se suceden distintos capítulos en los que, apelando a la vivencia individual y a datos, estadísticas y consejos, Oriol Pamies relata con todo detalle cómo suelen ser los primeros pasos en el mundo LGBTQ+: en relación con la familia, con la autoestima y con la sociedad. Por suerte, Pamies tiene claro que el mundo queer no se limita a una reivindicación sexual, sino que también integra la defensa de un modo de vida no normativo.

Sin embargo, como suele ser ya habitual en este tipo de ensayos, Oriol Pamies centra la atención sobre todo en el campo sexual. Si bien me parece correcto hablar sobre orientaciones sexuales, encuentros eróticos, chemsex, cruising y demás prácticas cada vez más habituales en el colectivo, no me parece tan correcto dedicar un capítulo entero a hablar sobre enfermedades de transmisión sexual, teniendo en cuenta que pueden afectar a heterosexuales por igual. A fin de cuentas, ello viene a postergar la imagen del homosexual como persona liberal y promiscua, que no siempre está relacionada con la realidad más pragmática.

En uno de los capítulos más interesantes -a mi parecer-, Pamies se explaya con datos e informaciones científicas o históricas cuyo objetivo es normalizar el mundo queer. Y, en efecto, no hay mejor manera de presentar a las personas LGBTQ+ como normales que hablando de Adriano y Antinoo, o de la supuesta homosexualidad de Alejandro Magno, Leonardo Da Vinci, Oscar Wilde o Eleanor Roosevelt. De todas formas, el ensayo parece estar muy poco documentado (ni siquiera cita sus fuentes bibiográficas), pues su referente sobre sexualidad más reciente es Alfred Kinsey. Nada que añadir.

Darío Luque