Entrevista a Cristina de Jos'h por "La marca del silencio"

Cristina De Jos'h nace en Madrid en 1945. En 1979 forma su propia empresa de diseño textil y artesanía. Por sus diseños se le otorga el premio Estrella Internacional a la Calidad y a la Excelencia en Ginebra (Suiza) y el programa Viejos Oficios en Antena 3 le otorga un premio de reconocimiento como La Única Diseñadora Española De Muñecas Del Siglo XX.

En 1987, hace su primera exposición de pintura a la que luego seguirán otras muchas por toda la geografía española. Tiene obra distribuida en varios países y expuesta en museos de arte contemporáneo españoles, además de pertenecer a las colecciones de varias galerías de arte y ser parte de la pinacoteca de la Casa de Alba.

En 1994 se publica su primera novela: Una muñeca con alma. Desde entonces ha publicado seis otra novelas, Rumores de caracolas, Doble hombre, Vidas escondidas, Destinos cruzados y La marca del silencio. Personalidades tan relevantes del mundo cultural como: Antonio Gala, Carmen Martín Gaite, Carlos Murciano, Rosa Villacastín y otros muchos, han alentado su trabajo, refrendando con sus opiniones la trayectoria de esta mujer tan polifacética.

ENTREVISTA

Defínete como mujer y defínete como artista.

Soy una mujer con gustos y tendencias intemporales. Me gusta ser un compendio entre varias épocas. Como artista me definiría como una creadora, ya que no solamente soy escritora, también soy diseñadora y pintora.

¿Cuándo eres más tú, cuando pintas, cuando diseñas o cuando escribes?

Es que cada faceta es absolutamente diferente. Cuando escribo, relleno todas las carencias personales y manipulo, según la historia, todo lo que mejoraría, en cierta forma, en las vidas de los seres humanos. Es también una manera solapada de contar mis propias experiencias y me sirve de terapia sobretodo.

Cuando pinto, como soy imaginativa, nunca sé lo que va a suceder. Entonces, toda mi atención se queda suspendida entre el lienzo y yo. Para mí el dibujo tiene bastante menos importancia que el color que, nunca o casi nunca, tiene planos reales. Son los colores los que mi visión interior desea sacar a la luz.

El diseño para mí representa combinar la era moderna con el buen gusto de otros tiempos. He logrado fundir el primor con materias que no representan un trabajo especial para poderlas usar. De mí han dicho que estoy muy anclada en la época renacentista, pero con un toque personal.

Dicen que hay quienes aman y quienes se dejan amar. ¿En qué posición estás tú?

Yo creo que soy de las que amo porque en muy pocas ocasiones en mi vida he sido amada como a mí me hubiese gustado.

¿Y cómo te hubiese gustado ser amada?

Me hubiese gustado ser amada entendiendo mi sensibilidad, compartiendo mi parte intelectual y física y sobretodo la amistad que para mí es lo más importante que existe entre los seres humanos.

Eres madre de cuatro hijos y abuela de una adorable niña de casi tres años llamada Carlota. ¿Crees que es difícil para una mujer hacer equilibrio entre familia y carrera?

No es imposible pero admito que lograrlo es difícil. Tienes que ajustar los horarios y cumplir básicamente todo el concepto familia, trabajo y asueto con una precisión estricta. Cuando mis hijos eran pequeños, escribía por las noches y pintaba los fines de semana preparando mis exposiciones. El resto de mi tiempo lo dedicaba a la empresa donde creaba y vendía mis fabricados.

Es sorprende que perteneciendo a una generación donde a la mujer se le criaba exclusivamente para ser esposa, madre y ama de casa hayas podido romper ese molde y ser empresaria y artista multifacética. ¿Qué crees que te diferencia a ti de otras mujeres de tu generación que aceptaron estas imposiciones?

Mi capacidad de lucha, mi forma de rebelarme ante todos estos conceptos machistas y sociales y una fe en que cualquier cosa que me proponía hacer la iba hacer y relativamente bien. No fue fácil pero ha merecido la pena.

¿Encontraste muchas críticas y obstáculos en tu camino?

Evidentemente que los encontré, en principio mi propia familia. Yo comencé mi empresa con la oposición de mi marido y el desánimo de mis padres. Finalmente, me impuse y lo conseguí. Mi primero libro, "Una muñeca con alma", que fue seleccionada para el premio de ensayo Espejo de España, me costó la separación con mi marido. Fue entonces que comencé a vivir en libertad y di un salto importante en mi carrera.

¿Fue un precio alto a pagar?

Ahora en la distancia evidentemente no. Fue lo mejor que me pudo pasar porque yo no creo en el amor sin libertad.

¿De cuál de tus siete novelas publicadas te sientes más orgullosa?

Principalmente de "Una muñeca con alma" porque en ese ensayo biográfico aglutiné todas mis experiencias propias y las de varias mujeres que me acompañaron en ese principio de mi empresa, mujeres con problemas similares a los míos, tantos sociales, familiares como económicos. Además, logré a través de esa historia, exponer la variación de viejos oficios que tenemos en España dedicados a la artesanía textil. En ella cuento como fui capaz de crear puestos de trabajo y apoyar a mujeres que estaban desorientadas y carecían de propósito personal en sus vida. Esto para mí fue un privilegio.

Después, "Rumores de caracolas" significó un reto porque en ese principio de oficio de letras no tenía seguridad de ser capaz de contar una historia con mi único soporte imaginario. Pero lo hice, y el resto fue como deslizarme en un tobogán maravilloso donde las estampas fluían y esgrimía vivencias a través de la ficción.

¿Cuántos de tus personajes femeninos son Cristina de Jos'h?

Ya lo dices tú en el prólogo de mi novela "Destinos cruzados", en mis protagonistas está mi visión, mi sensibilidad, mis alegrías, mis tristezas y mi mundo subjetivo que se desliza desde el teclado al papel. Todos esos elementos forman parte de quién soy yo.

En "La mujer del cuadro", la novela comienza con un primer paseo bajo la lluvia con uno de mis enamorados de adolescencia.

"Doble hombre" y "Vidas escondidas" están basadas en una gran historia personal de amor y desamor.

En "Destinos cruzados" confluye mi visión esotérica y un entorno mágico de mis antepasados enclavados en un pueblo determinado.

Con "La marca del silencio", aunque se trata de una obra de ficción con una información privilegiada de parte de algunos periodistas, me fusioné con Andrea, su protagonista, una escritora-periodista y a través de sus páginas pude hacerme una auto terapia por la pérdida de un amor.

Después de una vida tan apasionada, no exenta de altos y bajos, sin duda eres una mujer de profunda experiencia. ¿Desde tu perspectiva de hoy, qué mensaje le das al lector o lectora que ahora nos acompaña esta entrevista?

Que crean en ellos mismos y que no se olviden que los sueños se pueden convertir en realidad.

Gracias Cristina, yo soy testigo de que tus sueños, efectivamente, se convirtieron en una palpable realidad...

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