Anika entre libros

la playa de los ahogados

Ficha realizada por: Pilar Alonso Márquez
la playa de los ahogados

Título: la playa de los ahogados
Título Original: (la playa de los ahogados, 2009)
Autor: Domingo Villar
Editorial: Debolsillo


Copyright: © 2009, Domingo Villar c/o Guillermo Schavelzon & Asoc. Agencia Literaria
© 2009 Ediciones Siruela, S.A.
© 2011, Random House Mondadori S.A. ISBN: 9788499892764
Etiquetas: autores escritores españoles género negro hispanos literatura española literatura hispana policiaca policiaco

Argumento:


La marea ha arrastrado el cadáver del pescador Justo Costelo hasta una playa de Vigo. Todo parece indicar un suicidio, si no fuera por el modo en que tiene atadas las manos.
 
El inspector Leo Caldas trata de esclarecer el crimen y para ello viaja hasta Panxón, el pueblo de pescadores de la víctima, un lugar que parece esconder muchos secretos.

Opinión:


Domingo Villar , gallego de nacimiento y madrileño por adopción, ambienta esta magnífica novela en un pueblecito de la costa de Vigo, cuyos habitantes responden a la perfección al estereotipo del carácter gallego: herméticos, reservados y reacios a contestar a una pregunta de forma directa. En ese ambiente de pescadores y hombres rudos ni siquiera el protagonista, el inspector Leo Caldas, parece encajar. Un hombre de ciudad que se ensucia los zapatos y se marea a bordo de una barca, pero que comprende el carácter de sus paisanos.
 
El personaje es extraordinario y Domingo Villar lo acompaña de unos secundarios que son un lujo, especialmente su padre y su compañero Estévez, un zaragozano siempre dispuesto a utilizar la fuerza bruta y al que le cuesta adaptarse a la forma de ser de los habitantes de su nuevo destino.
 
Aquí no hay asesinos en serie ni un reguero de cadáveres fruto de los desvaríos del psicópata de turno. Lo que aquí se narra es algo mucho más profundo y mucho más verosímil, un crimen disfrazado de suicidio que va remover el pasado de algunos de los vecinos de Panxón, el pueblo en el que vivía la víctima. Y la investigación va a avanzar como avanzan estas cosas, poco a poco, mientras se va tirando de todos los hilos que se encuentran para lograr encontrar la madeja.
 
La forma en que Domingo Villar nos sumerge en la historia es de lo mejor de la novela. La lluvia, las calles de Vigo, el mar, la gastronomía… casi podemos sentir el rumor del oleaje y hasta nosotros llega, desde la lonja, el olor del pescado fresco. La capacidad del autor para transmitirnos la atmósfera que describe es soberbia y, si entrecerramos un poco los ojos, casi podemos ver a Leo Caldas apoyado en un muro, fumando un cigarrillo mientras le da vueltas a sus pensamientos.
 
El crimen es un misterio desde el inicio, para los personajes y para el lector. Es imposible saber, ni siquiera intuir, el sendero que va a tomar la trama. Las pocas pistas disponibles van a aparecer espaciadas en el tiempo, y cada una de ellas va a abrir una serie de puertas y de nuevos caminos. Y durante todo ese tiempo, el suspense se mantiene y el interés no decae ni un segundo.
 
Los diálogos están muy bien trabajados, con algunas pinceladas de humor que contribuyen a sentirnos más próximos a sus personajes. Las situaciones y las escenas poseen un gran realismo, y somos capaces de visualizarlas sin esfuerzo.
 
Pero hay más, mucho más en esta novela. Una de esos extras es una libreta que el padre de Caldas lleva rellenando desde hace años: el libro de los idiotas, donde apunta el nombre de la persona que decide incluir en ella y el motivo, una idea curiosa que hace que nos lamentemos el no haber comenzado nunca ninguna. Pero también hay una referencia a una novela de Fred Vargas (excelente autora francesa de novela negra) y, para mi regocijo, algunas menciones a la película Capitanes intrépidos, una cinta de 1937 protagonizada por Spencer Tracy y Freddie Bartholomew. El film, basado en una historia de Rudyard Kipling, tiene mucho que ver con los protagonistas de la novela de Domingo Villar, pues también habla de los valientes hombres del mar y de los lazos que se crean entre ellos. Si aún no la han visto, es un buen momento para hacerlo, ahora que llega el otoño. Y cuando la hayan terminado, cojan el libro de Domingo Villar y disfruten de esos guiños como lo ha hecho una servidora, emocionada igual que el protagonista al recordar a Manuel el Portugués. 
 
Domingo Villar escribe más que bien. Esta novela es un claro ejemplo. 
 
Pilar Alonso Márquez

Frases de esta opinión pueden utilizarse libremente en otros medios para promoción del libro, siempre que no se varíe y se mencionen al autor de la misma y al medio anikaentrelibros.com

¿Te ha gustado? Compártelo:

Comentario de los lectores:

Si te gustó este libro, también te puede interesar...

Publicidad
Anika entre libros
Actividad subvencionada por el Ministerio de Cultura
Ministerio de cultura

Esta web utiliza cookies para obtener datos estadísticos de la navegación de sus usuarios. Si continúas navegando consideramos que aceptas su uso. Más información X Cerrar