el monstruo de las galletas. acelerados en el instituto fairmont

Opinión:

El primer relato es una historia tipo “otra realidad es posible” o “esto no es lo que parece”. En ese sentido, es un poco inverosímil la aceptación tan fácil del hecho, es decir, personalmente yo me resistiría a creer lo que me cuentan. Los personajes, en ese sentido, no muestran resistencia alguna, es más, lo creen a pies juntillas.

Por otra parte, me ha gustado especialmente la velocidad de la narración. Se centra lo justo en los detalles, como corresponde a una novela corta de estas características, siendo cada vez más rápido en el desarrollo y ágil en el final. Rodeado de terminología técnica informática (hasta en el título), los personajes se desenvuelven satisfactoriamente sin necesitar mayores descripciones dejando a la libre imaginación del lector lo faltante.

A destacar el guión, es muy interesante y es capaz de mantener al lector en vilo durante su desarrollo, sin que recuerde para nada a gazpacho de otras historias ya leídas. Además, la línea argumental mantiene la intriga, lo cual hace la historia bas-tante atractiva.

En "Acelerados en el Instituto Fairmont", la línea argumental es menos concisa. Se trata de unos días de la vida de un segundón de trece años. El argumento está más basado en los roles sociales de esa edad, todo decorado con mucha tecnología y algo de futurismo rodeado de “normalidad”, tales como ropa que lleva todo tipo de chips para acceder en cualquier momento a cualquier información que haya en red, personas que actúan en remoto, que están aquí y allá… Se habla de exámenes tipo americano, en grupo y de investigación, algo a lo que en España no estamos acostumbrados, por lo que el entorno se sitúa más bien en las pruebas de evaluación de final de curso.

Siguiendo esta línea, no me queda otro remedio que criticar el lamentable trabajo de traducción que se ha hecho en estas dos novelas, hecho que transforma ciertos párrafos en ilegibles, detalles sin sentido y que deja al lector un regusto a americanismos.