el bosque de los corazones dormidos

Opinión:

La novela de Esther Sanz sigue un esquema que hemos visto repetido en numerosas ocasiones dentro de la novela juvenil romántica actual, y que, sin duda, es una fórmula de éxito: chica muy joven e insegura, en este caso deprimida y triste, además, se enamora de chico guapísimo y  "con poderes". Resultado: un amor casi imposible.   
 
La fórmula en que se basa esta futura trilogía, no es original, pero funciona, y funciona bien entre el público adolescente. No es, pues, un error recurrir a ella. Y más cuando la autora sabe adornar el relato de  trazos  originales y valiosos: las descripciones de paisaje (los bellos y misteriosos bosques sorianos), el peso de las leyendas populares, e, incluso, ese componente sugerente que se fundamenta en la vida de las abejas y sus misteriosas propiedades.
 
La primera parte de la novela tiene gancho. Quizás porque es el momento en que la autora dibuja la intriga, y la dibuja bien. La lectura pasa de un modo fluido y el lector quiere saber más, solucionar tantos interrogantes.
 
A partir del momento, hacia la mitad de la novela, en que estos interrogantes nos van siendo resueltos, la trama pierde interés, según mi opinión, porque pasa a sustentar todo su peso en unos personajes un tanto frágiles. Ni la protagonista, cuya actitud resulta inverosímil desde el primer momento en que, dado su carácter y la profunda depresión en que está sumida, decide enfrentarse a todos los misterios y soledades de la Dehesa, ni los secundarios , Berta y Braulio, o el mismo Álvaro, dan la talla a la hora de sostener el peso de la novela.
 
Por dar un ejemplo, el personaje de Berta, es completamente imprevisible y, a menudo, sus reacciones causan sorpresa en el lector por lo desmesuradas.  Y creo que Braulio, al contrario, es tan previsible, que "canta" desde la primera página.
 
Clara, la protagonista, como he apuntado anteriormente, es sometida a una situación forzada. Está ahí porque el guión lo exige. Pero si analizamos la situación con detenimiento, vemos que Clara es una niña de dieciséis años, que acaba de pasar por una situación traumática. Es una muchacha inmadura y lo último que el lector se imagina es que llegue a someterse  a ese aislamiento forzoso y un tanto terrorífico, bajo el blando e irresponsable  consentimiento de un tutor que debería velar por ella.
 
Y si nos referimos al "chico", a ese Bosco maravilloso de quien se enamora Clara, y Berta, y todas las féminas de este mundo, sólo cabe decir que cumple su papel, y que o jugamos al juego de la autora y entramos en esa fantasía que nos propone, aunque la he encontrado un tanto rocambolesca, o apaga y vámonos. 
  
En conclusión, y aunque El bosque de los corazones dormidos no me acaba de parecer una novela redonda y tiene puntos débiles, creo que la mayor parte de adolescentes que la lean no van a pensar lo mismo, ni la van a analizar bajo ese prisma de adulto que os acabo de ofrecer. Y es que esta es una novela dirigida a un público determinado y seguro que cumplirá las expectativas de ese público.
 
Y como esta es la primera parte, esperaremos a ver qué pasa en la segunda. 
  
Núria Pradas Andreu