un mundo más verde

Opinión:

Este es un buen método para concienciar a los niños respecto a la importancia del medioambiente, el mundo que les rodea y cómo conseguir que funcione bien sin malgastar. No sólo por el diseño, que ya está estudiado para que sea llamativo, también porque contiene varias actividades tipo test en las que el crío podrá “medir” su compromiso con el cuidado de la naturaleza.
 
Redactado de manera cercana se dirige directamente al joven lector, le informa de distintos procesos importantes (incluso –por poneros un ejemplo- de lo que supone crear sólo diez hamburguesas), le invita a descubrir solapas donde encontrará más curiosidades y hasta podrá leer notitas en los propios desplegables creados en tres dimensiones (por ejemplo en las hojas de un árbol o en los edificios de una ciudad)
 
Lengüetas para tirar, ruedas para girar, solapas para levantar, desplegables 3D para admirar, ventanitas para deslizar y otros diseños más originales creados para este tomo, conforman un volumen muy interactivo sin olvidarse de la parte didáctica.
 
“Un mundo más verde” finaliza con un juego de casillas, preguntas y respuestas en la última página.
 
Pero si para educar a un niño lo idea es dar ejemplo, la editorial Beascoa ha cumplido su parte. En contraportada indica que para hacer este ejemplar ellos han puesto su parte reciclando papel y otros materiales, apagando los ordenadores cuando no se utilizaban y destinando dinero a plantar árboles.
 
Pocas páginas pero muy bien optimizadas, y una invitación a crear un mundo mejor sin contaminar ni malgastar de la forma más sencilla, valiéndonos de nuestros actos diarios. Para los niños colaborar con estas sugerencias es pan comido.
 
Anika Lillo