me habría encantado ser etnóloga

Opinión:

Por comics como éste agradece una ser mujer y tener sentido del humor. Lo bien que me lo he pasado leyendo “Me habría encantado ser etnóloga” es difícil de describir. Además de hacerme reír me he sentido bien ¿Que ridiculiza y parodia a cierto tipo de mujer? Sí, claro ¿y qué? Margaux Motin tiene gracia (no todo el mundo tiene ese talento). El buen sentido del humor incluso cuando hablas de ti mismo es la mejor forma de ver y vivir la vida. Además este volumen lo hace una mujer y sabe de qué habla. Por supuesto que una no se ve en ese personaje en todas las secuencias, posiblemente en pocas porque Motin parodia todas las escenas, pero quién sabe… puede que en alguna, como mujer, sí te veas, y como hombre veas a tu chica.
 
Este es uno de esos comics que tiene tantísimas páginas bien aprovechadas que te pueden llegar a arrancar una carcajada porque vas uniendo risita tras risita. Como éste hay pocos, sinceramente.
 
Desde luego si eres mujer y tienes sentido del humor te vas a morir de la risa, y si eres hombre seguro que te partes el pecho. Por cierto… vosotros también salís. Motin también ha parodiado al hombre aquí pero eso no quiere decir que salga siempre mal parado, como he dicho antes la autora tiene gracia, y no es lo mismo tener gracia que hacerse el gracioso.
 
Las ilustraciones de Margaux Motin son muy desenfadadas pero físicamente perfectas. Aunque el tomo no es en blanco y negro, los colores que usa son los justos, y las viñetas en su mayoría son tiras o pequeños relatos (microrrelatos) guionizados e ilustrados. Dibbuks lo ha encuadernado como la gran mayoría de sus comics, en tapa dura y de calidad.
 
Muy recomendable. Y sanísimo para la salud.
 
Entre “Lincoln” (del trío Jouvray) y Margaux Motin, ya tengo un par de autores franceses de humor que me chiflan. ¡Os lo aconsejo porque os vais a reír!
 
Anika Lillo