libre, solo y sin pasta
Título: libre, solo y sin pasta
Título Original: (libre, seul et assoupi, 2010)
Autor: Romain Monnery
Editorial:
Grijalbo
Copyright: © Traducción, Rosa Alapont Calderaro, 2011
1ª Edición, Junio 2011
ISBN: 9788425346422
Etiquetas:
autores
comedia
contemporánea
escritores
franceses
humor
literatura francesa
Argumento:
Un joven que acaba de terminar la carrera es apremiado por sus padres para que busque trabajo y logre así emanciparse. Él mismo, Trasto, narra sus peripecias para poder estirar la felicidad que vive como un auténtico ocioso dedicado con ahínco a largas siestas, escuchar música, ver la televisión y tocarse la entrepierna.
El protagonista aprovecha la oferta de una compañera de estudios y así en París, en un piso compartido con otros jóvenes, se esfuerza por continuar siendo auténtico y consecuente con su filosofía de vida. Ajeno a las insinuaciones de su amiga, a las invitaciones para relacionarse con gente joven, se convence cada vez más de su incapacidad social. Sólo la necesidad ya urgente de obtener el mínimo dinero para subsistir le convence para tratar de conseguir un empleo. Según se suceden las anécdotas simpáticas en el trabajo, sus convicciones se tambalean.
Opinión:
La foto de la portada así como el título de la novela resultan muy ilustrativos para el tipo de novela ligera y de entretenimiento simpático que me ha parecido.
El personaje de Trasto, que nos habla en primera persona, refleja como una caricatura el estereotipo de un joven pasota que acepta ese rol plenamente convencido de que la ley del mínimo esfuerzo entraña la verdadera felicidad. Busca la empatía con el lector y justifica su empecinamiento por no hacer nada como un signo de persona íntegra que no se corrompe por el afán de dinero, prestigio u otros intereses.
Sometido a un primer trabajo precario, el antihéroe se rebela y tiene que rechazar que le sodomicen. Una vez en la calle muestra pletórica su dignidad. Después intenta engañar al lector como que vive en estado feliz pero, poco a poco, comprende que cuando se le acabe el dinero aparecerán otro tipo de problemas.
El humor está presente en toda la obra, aparece al lado de la filosofía de vida que adopta y defiende constante el autor, de principio a fin. También en muchas escenas, donde el autor examina de arriba abajo al resto de personajes que le rodean, la sonrisa es inevitable. Vacila a sus jefes en una feria de automóviles donde es empleado con mucho ingenio, a sus compañeros y a los visitantes también les domina hasta provocar desenlaces descabellados.
Durante las tres partes que tiene el libro, no he podido dejar de acordarme de Ignatius Really, aquel personaje peculiar y sucio de “La conjura de los necios”. Ambos podrían parecer parientes pero ¡ojo!, no lo son. El personaje de Trastos es mucho más edulcorado, amable y creíble en una sociedad consumista, de clase media, marcada por el marketing con gran índice de paro juvenil, y donde es frecuente el abuso de poder. Con todo ello, resulta una novela idónea para pasar un rato agradable.
Por Soledad Gallardo
LIBRE, SOLO Y SIN PASTA. Un joven recién licenciado comprueba que lo que más le gusta hacer en la vida es detenerse a dormir y vivir ocioso. Aunque sea ante cuatro paredes y a costa de ser un parásito social, defiende su postura con argumentos y situaciones disparatadas para no violar así su integridad ni desviarse de lo que para él es la auténtica felicidad.
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