aprende a ser feliz. te doy mi palabra

Opinión:

Isabel Gemio  es una de las periodistas más populares de este país. Desde hace unos años, su vida profesional está centrada en la radio en donde presenta, en la emisora “Onda Cero”, un programa cada fin de semana: “Te doy mi palabra”. Como ocurre con muchos programas radiofónicos, a este también llaman muchos oyentes.
 
En el prólogo de este libro, la propia Isabel nos explica el porqué de la aparición de este libro. Ella reconoce que un día se aventuró a incluir en el programa un espacio de “autoayuda” que obtuvo una respuesta muy positiva enseguida. En este espacio, ella cuenta con la ayuda de la psicóloga María Jesús Álava. Ha sido la editorial Espasa Calpe la encargada de lanzarlo al mercado hace unas cuantas semanas.
 
Al espacio han llamado muchos oyentes que han compartido sus problemas e inquietudes. Parte de estas intervenciones son las que se recogen en el libro. Basándose en ellas, María Jesús Álava trata de indicar las pautas a seguir para superar los problemas.
 
Como puede verse, se trata de un libro de autoayuda. Libros de esta temática siempre ha habido pero creo que, a raíz del boom de “El Secreto” aún más. Personalmente no acaban de convencerme. Muchas veces me dan la sensación de que “desayudan” más que ayudan. Son muy pocos los libros de autoayuda que realmente me han ayudado, entre ellos destaco el de Salvador Badillo (Bendito karma) y los de Rosetta Forner, ¿y “Aprende a ser feliz”?
 
No me ha disgustado, es cierto, pero tampoco es de los que me han entusiasmado. El libro no está mal, al presentar experiencias y casos particulares de los oyentes, es mucho más creíble que otros como el de “El Secreto”. Que estos casos, además, sean españoles los hace más cercanos. Es mucho más fácil para el lector identificarse con alguno de los problemas que plantean los oyentes que han participado, que con casos que se muestran en libros de autores americanos. Además, como ocurría con el libro de Salvador Badillo, está escrito con un lenguaje perfectamente comprensible. 
 
María Jesús Álava es psicóloga, hubiese podido perfectamente usar un lenguaje rebuscado, complicado, irse por las ramas y en cambio no lo hace. Su forma de escribir es como si estuviese hablando cara a cara con el lector lo que hace que el mensaje que quieren transmitir, tanto ella como Isabel Gemio, llegue más y mejor al lector.
 
Además, apoya cada uno de los consejos e ideas que lanza con cuadros-resumen en donde recoge los puntos claves a seguir o destaca las ideas más importantes. Esto me parece muy bien, el lector puede tomar nota para seguir sus consejos los cuales tampoco son utópicos sino directos y creíbles. Habla, escribe de una forma clara y directa y eso me ha gustado mucho. 
  
Creo que la lectura de este libro puede ayudar a aquellas personas que se sientan un poco perdidas o no sepan qué hacer ante una situación un poco desesperada. La verdad es que tras leerlo te sientes bien. Igual es que me ha pillado en un momento un poco “plof” pero no me ha disgustado nada. Hay momentos con los que me he sentido identificada y las propuestas que ha expuesto María Jesús Álava me han ayudado.
 
La lectura de este libro es recomendable. No es un libro más de autoayuda, al menos éste tiene contenido y no se limita a encauzar a la gente en la idea de que lo único que da la felicidad es el dinero. No, éste apunta hacia puntos mucho más íntimos e importantes. Por ello vale la pena leerlo. Y no con una lectura rápida, sino deteniéndose y tomando buena nota de cada idea. Es de esos libros que reclaman leerse con una libreta y un lápiz al lado.
 
Apuntar que parte de los beneficios que se obtengan con la venta del libro van a parar a la Fundación Isabel Gemio para la Investigación de Distrofias musculares y otras enfermedades raras. 
 
Ysabel M.