la media distancia

Opinión:

En 1983, el joven novelista Alejandro Gándara ganó el Premio de Novela Prensa Canaria de ese año, dotado con 1.200.000 pesetas, con la obra La media distancia, su primera novela, aunque ya había obtenido el Premio Ignacio Aldecoa, de relatos breves. Aprovechando la publicación de su última novela “El día de hoy” (Alfaguara, 2008), se reedita esta primera obra que fue considerada por Juan Benet, miembro del jurado como, "la mejor novela que he leído en los últimos quince años en España. El tema me parece inédito y creo que en cualquier país de Occidente podría servir como reflexión de esta época".

El tema central de la novela lo explica el propio Gándara cuando afirma: "Tomo como pretexto la historia de un atleta para hacer un análisis sociológico de la generación de los años setenta. En realidad es una combinación de lo que en la experiencia vital significa el retorno del tiempo pasado, aquello de que la falta de olvido es la locura”.

Las mismas cualidades y defectos que describí en mi reseña de "El día de hoy" pueden ser perfectamente extrapolables a esta novela: una sólida estructura narrativa, un gusto escrupuloso por la descripción, una historia contada desde dentro del personaje, protagoniza por un sujeto que no termina de superar los traumas del pasado y que ha sido educado en que ganar es siempre lo más importante y que ha hecho de competir su modus vivendi.

De nuevo encontramos un tipo, Charro, que se convierte en portavoz de las desilusiones y desesperanzas de toda una generación de españoles, por lo que muchos lectores podrán sentirse perfectamente identificados o reflejados en sus angustias vitales, en sus frustaciones al no ganar.

Gándara nos invita a entrar en un mundo propio al cual, como ya advertí en la anterior reseña, te debe apetecer sumergirte.

Por otro lado, me sigue incomodando esa sensación que me trasmite su narrativa como de que en realidad “no pasa nada”, de tiempo dilatado in extremis, de lentitud y monotonía, reflejo por otra parte del paisaje interior de sus personajes.

Joseph B Macgregor