Todavía no quiero recordar. Todos esconden algo

Opinión:

"Todavía no quiero recordar", de Susana Aguilera, es un thriller ambientado en los años 80 en un tranquilo pueblo de Murcia.

La novela comienza con un prólogo potente, donde conoceremos a Sandra -uno de los personajes principales-, que tras un accidente de tráfico se despierta en la cama de un hospital sin saber qué ha ocurrido.

Tras esa breve introducción, la autora nos traslada a unos meses antes, cuando el joven teniente de la Guardia Civil, David Moreno, llega a su nuevo destino, un pequeño pueblo de Murcia.

La novela está dividida en dos partes, en la primera, narrada en primera persona por el teniente Moreno, conoceremos las inseguridades del joven -que teme no estar a la altura del cargo-, también a las gentes del pueblo, sus costumbres, envidias y demás y al resto de compañeros de la Guardia Civil.

Nos haremos una idea bastante exacta de la vida en el cuartel y de todo lo que sucede en el pueblo, desde pequeños altercados entre vecinos hasta cosas más serias como la red de narcotráfico que opera en la zona, la corrupción política o la lacra que supuso el consumo de heroína y otras drogas, especialmente, en los jóvenes de aquella época.

La segunda parte está narrada por Sandra, la esposa del cabo "Malamen", otro de los miembros del cuerpo. Trabaja limpiando y acondicionando las habitaciones del cuartel y su matrimonio no pasa por su mejor momento. Es 15 años mayor que el teniente, pero no será un impedimento para que surja entre ellos algo más que amistad.

En esta segunda parte es cuando se desarrolla la acción y donde se supone que la trama va ganando fuerza, pero para mi gusto ha ido perdiendo intensidad. Hay varios giros interesantes en la historia, pero si eres asiduo lector de novela negra, intuirás demasiado pronto por dónde van los tiros.

Los personajes principales están bastante logrados y nos podemos hacer una idea clara de cómo son y de sus aspiraciones. También hay varios secundarios con un peso importante en la historia, como Marta, la hija de Sandra y del "Malamen"; Marcos, el hijo de otro guarida civil, o Concha, la esposa del alcalde y protagonista del triángulo amoroso de la novela, junto al teniente Moreno y a Sandra.

Pero sin duda, lo mejor de la novela, es su ambientación: corre el año 1987, la movida madrileña está en pleno auge; la heroína comienza a causar estragos; el maltrato a la esposa está justificado -nadie cuestiona lo que pasaba en cada casa- y ETA lleva a cabo el atentado en el Hipercor de Barcelona, uno de los más impactantes de su historia. Todo esto nos ayuda a sumergirnos en la historia con gran facilidad.

El lenguaje es sencillo y fluido, y está lleno de localismos propios de la zona de Murcia.

En resumen, "Todavía no quiero recordar" es una lectura agradable y fácil de leer; no es una gran novela, pero cumple su función de entretener.

Mónica CZ