Ojo de oro: Metamorfismos, Psicoproverbios y Poesofía

Opinión:

Alejandro Jodorowsky no es un autor más ni tampoco se ciñe a la escritura. La faceta de escritor la compagina con la de cineasta, psicomago, tarólogo y pensador. Facetas que, también hay que decirlo, no aparecen desligadas ni separadas tajantemente sino que, en cualquiera de sus escritos y obras, están muy unidas. Una característica, ésta, que convierte a Alejandro Jodorowsky  en un autor muy interesante pero, al mismo tiempo, muy difícil de reseñar porque tampoco sus obras son convencionales. Y esta característica es lo que hace que sea un autor bastante especial, de los que no dejan al lector indiferente. Jodorowsky es un gran pensador.

Una buena muestra de ello la constituye este libro que ha editado Siruela. Libro con un título un poco rebuscado, algo muy típico de este autor. ¿Y qué encuentra el lector en este "Ojo de oro (Metaforismos, Psicoproverbios y Poesofía)? Netamente, el lector encuentra 3.000 tweets, 1.000 preguntas y respuestas así como 64 reflexiones con los hexagramas del I Ching. Pero, ahora bien, los tweets que se recogen en este libro no son simples frases construídas con 140 caracteres sino que van mucho más allá. Es más, la propia idea de Jodorowsky a la hora de abrir una cuenta en Twitter fue la de buscar una revolución poética, él pretende que cada uno de ellos vaya más allá de lo personal, que provoque una respuesta en la gente. Algo que puede parecer un poco extraño pero que es de lo más normal en él y que se da en todas sus obras tanto las impresas como las cinematográficas. Jodorowsky  siempre trata de dar un mensaje, de provocar al lector, de hacer que éste reflexione, que tome su frase como un consejo, como una ayuda. Es un autor que incita al lector y ello se aprecia claramente en este libro.

Por este motivo, "Ojo de Oro (Metamorfismos, Psicoproverbios y Poesofía)" no es un libro ni para leer rápidamente ni para dejar olvidado en un rincón una vez concluida la lectura; tampoco para leer con un orden. Sino que es de los que invitan a ser leídos más de una vez. A cada nueva lectura, el punto de vista, la percepción que tiene el lector varía. Jodorowsky tiene un estilo muy peculiar, igual puede ser fácil de entender como que precisa de una segunda lectura y ello es debido a que le gusta jugar con el lenguaje, transformarlo, para lograr una mayor atención por parte del lector. Una característica que no considero negativa sino todo lo contrario porque aporta una personalidad propia a sus escritos y es la responsable de que tenga tantos lectores y seguidores en su cuenta en Twitter. 

En una palabra: sabe cómo conectar con el lector y ello hace aún más recomendable la lectura de este libro. 

Ysabel M.