La vuelta al mundo en 72 días y otros escritos

Opinión:

Que un periodista sea la noticia de la noticia ya no extraña a nadie. Sin embargo, que una periodista de finales del siglo XIX aumentase la tirada de un diario si resulta asombroso. Pero es necesario ajustarse las gafas de lector contemporáneo para conocer a Nellie Bly, puesto que de otra forma ni veremos ni entenderemos su trascendencia en unos Estados Unidos terriblemente moralistas. Su importancia va más allá de esos setenta y dos días en los que dio la vuelta al mundo, porque Nellie no fue un personaje de Julio Verne, fue parte de la noticia, el todo que la explicaba. Nellie estaba dentro del suceso, y si su objetivo era informar de primera mano sobre las condiciones de los enfermos en un frenopático no dudaba en hacerse pasar por loca; para conocer las condiciones de trabajo de las obreras se convirtió en una de ellas. 

Dicen que inauguró el periodismo gonzo, y probablemente fue así. No lo dicen, pero sucedió: estableció una diferencia entre los periodistas que vivían de la noticia y los que convivían con ella. Por eso informó de la Primera Guerra Mundial desde la propia Europa y habló de feminismo con las feministas más destacadas de su país.

Sus crónicas y sus puntos de vista no dejaron indiferente a los norteamericanos, y pese a que en ocasiones su lenguaje era similar al de una dama repelente, demostró una valentía y tenacidad sin parangón. Su particular percepción del papel femenino en el mundo laboral resquebrajó la imagen de la mujer florero.

Nellie Bly vuelve a ser noticia después de cien años, es historia del periodismo, y el presente volumen recoge una parte de ese incansable saber hacer.

"La vuelta al mundo en 72 días y otros escritos" es un homenaje al periodismo inconformista -la propia periodista se mostró indómita en el mundillo de la prensa escrita-, pero sus artículos y crónicas pueden decepcionar al lector del siglo XXI. A fin de cuentas, desde finales del siglo XIX la manera de informar ha experimentado cambios radicales. No obstante, quien eche un vistazo a sus escritos descubrirá a la pionera de un periodismo atrevido, a una profesional que escribía desde la noticia y no de lo noticiable.

Sus trabajos como infiltrada, su famoso viaje alrededor del globo o sus crónicas de la Primera Guerra Mundial componen un libro único y representan una gran oportunidad para conocer a una extraordinaria creadora de noticias.

Si quienes se acerquen a Nellie Bly están dispuestos a contextualizar su profesión, este es su libro; por el contrario, si pretenden establecer comparaciones entre su época y la nuestra, están periodística y literariamente perdidos. Ella fue muy avanzada en un país moralmente atrasado, pero lo fue hace mucho tiempo.

Jorge Juan Trujillo Valderas