Invasor

Opinión:

Esta es una de las novelas que he leído con más capacidad de angustiarte hasta el punto de sentirte como el protagonista, Pablo. Cuando él se siente mal, tú te sientes mal. Es curioso, porque es difícil, diría incluso que imposible si no se ha estado en su situación, sentirse identificado con él, sin embargo puedes empatizar y sufrir con él. Te transmite toda su angustia hasta tal punto que a veces te subyuga, te ahoga, y necesitas un respiro. Considero esta particularidad un punto a favor de la labor de Fernando Marías. No todos los autores son capaces de transmitir con tanta ferocidad una sensación tan agobiante de angustia hasta el punto de afectarte.

En "Invasor" se mezcla, con el drama, una historia de fantasmas y un misterio. Sabemos que a Fernando Marías le gusta introducir un elemento o fantástico o de intriga, terror a veces, en sus novelas. Yo diría que en este caso en un momento dado se convierte en terror, elevándose el tono conforme llegas al final (final de película, por cierto).

Pablo vuelve a casa machacado y se siente aún peor cuando se entera de que hay una historia oficial y otra real. Él quiere dar a conocer la real. Al mismo tiempo los fantasmas de sus muertos le acosan y él no se recupera con suficiente lucidez. En su recuperación se siente poseído -y en cierta forma lo estará- por uno de los muertos, y los lectores viviremos y sufriremos con él las sensaciones más impotentes y angustiosas imaginables. Sobre todo cuando se enfrente a su compañero, a su esposa y a su hija pequeña.

Esta no es una historia de guerra, más bien es la historia del resultado de un ataque inesperado, y de un misterio que tiene que ver con algo que hizo su compañero en Irak y que él desconoce. Cuando finalmente se entera -y nos enteramos- de aquello, los fantasmas cobran otra importancia y el drama se convierte en una historia de terror.

Angustiante, sí, mucho, pero impresionante también.

"Invasor", ganador del premio Dulce Chacón, fue llevada al cine este pasado año por Daniel Calparsoro. En ésta no se conoce tan rápidamente lo ocurrido. En la novela todo empieza por el principio, en la película hacen uso del flashback. Y una curiosidad: en el libro imaginaba a la mujer con melena corta y a la hija con el pelo largo, y en la película la mujer llevaba el pelo largo y la hija una melena corta. Nunca coincidimos. En realidad, las diferencias entre la película y el libro son considerables, no obstante ambas versiones valen la pena. La película es un thriller político de principio a fin, y el libro tiene todos esos matices que consigue Fernando Marías cuando incluye varios géneros en una sola obra. 

Anika Lillo