Experiencias en la frontera. Mis contactos con el más allá

Opinión:

Esta obra se divide en dos partes. La primera tiene que ver con Paloma Navarrete y cómo empezó todo. Desde su niñez hasta su 'educación' con el chamán que la hizo controlar muchas más cosas de las que imaginaba que podría hacer. La segunda son experiencias vividas por ella -y otros, a veces el grupo Hepta, a veces con sus alumnos- en el mundo de las apariciones, los poltergeist y otras manifestaciones fantasmales que incluye a animales.

Creía, estaba convencida, de que me gustaría mucho más conocer todas esas experiencias que su vida, y me equivoqué. Ni os imagináis cuánto. Una vez cerrado el libro admito que la lectura de su aprendizaje ha resultado mucho más interesante que las propias historias de espíritus, quizás porque cuando habla de ella misma transmite mucho más que cuando cuenta sus visiones ya de una forma recopilada. Se debe, seguramente, a que -como comenta en el epílogo- ha tratado de desdramatizar las historias con el fin de que no resulten terroríficas porque, según Paloma, no lo son. Ni los espíritus pueden hacer daño, ni provocan terror. Eso ha hecho que inconscientemente le haya restado un poquito de emoción a los encuentros con fantasmas porque no transmite terror ni emoción alguna. Una lástima. No obstante no deja de ser un recopilatorio de apariciones del más allá que os encantará leer si os gusta el tema como a mí.

Me quedo, a pesar de todo, con la primera parte, donde Paloma narra su juventud, su vida en Guatemala con sus hijas y su primer marido, que quedan aquí en un segundo plano a favor de una aventurera y pizpireta joven deseosa de aprender con un chamán de lo más intrigante e interesante, de esas pocas personas que crees ver como si fuera un indio americano en comunión con la tierra, la naturaleza y otros misterios. Me quedo con lo que seguirá: una Paloma que vuelve ya a Madrid con sus hijas y empieza una nueva vida acercándose a otros estudiosos del tema como Jiménez del Oso (recordemos que en aquellos años la existencia de fenómenos extraños era pan de cada día y se veía con naturalidad en prensa y televisión, no como hoy que todo parece criticable), y con una Paloma que ha acabado siendo maestra porque ya le tocaba a otros ser alumnos.

De esto último sabremos más, porque Paloma ha ampliado sus experiencias -y también parte de su biografía- en una segunda parte titulada "Otras fronteras, otras realidades. El aprendiz de brujo". A por él.

Anika Lillo

Foto homenaje