El esclavo de la rosa 2

Opinión:

Esperar tanto tiempo a tener una segunda parte es una tortura. Para cuando lees el segundo volumen o bien relees el primero, o bien debes tener una memoria brutal para saber por dónde va la historia o quién es quién. Como la historia estaba tan clara no me ha resultado un problema recuperarla, pero admito que al no releer el primer volumen, saber quién es quién y aquel pasado que les marcó, me ha costado reconocerlo todo. Una segunda lectura del comic me ha aclarado finalmente todo, y me he sorprendido.

Javi Cuho insiste en el misterio, durante y después, y no sólo en la  parte romántica que en este caso se vuelve cruel. Ese romance que podría haber sido hermoso se vuelve feroz cuando el joven Hans se convierte en la sumisión absoluta a su amor platónico -el Conde la Rosa Negra- para demostrarle su amor. Recordemos que el Conde lleva máscara y es rubio, y que Hans escribe sobre él. Eso ha reforzado su amor, y cuando al fin lo encuentra se rendirá ante él, cosa que el conde no aceptará. Hay un por qué que Cuho se cuida muy mucho de contar, pero veremos en un momento dado una imagen del Conde Magnus rendido ante una copa y sus pensamientos, que nos descubrirá un secreto tremendo. Es entonces cuando entendemos la crueldad del hombre misterioso.

Por otro lado, como decía antes, no finaliza la bilogía sin dejar, de nuevo, el misterio activo. Misterio que por otro lado no tendrá continuación porque se trata de una bilogía, pero que se puede comprender fijándose bien en ese último rostro que nos permiten ver.

Como era de prever, Cuho nos ha regala una historia interesante donde no hay sexo explícito y, sin embargo, donde las imágenes que sobreentendemos lo son, además de dolorosas.

Van Duran se encarga de finalizar la bilogía respetando absolutamente a sus personajes en sus dibujos. Es más, se le agradece la capacidad de narrar con imágenes cuando el guión de Cuho queda en silencio, contando en realidad lo que el guionista quiere. Son un dúo muy bien compenetrado, de ahí que "El esclavo de la rosa" haya salido tan bien parado. 

Anika Lillo