Mis queridos diseñadores (gráficos)

Opinión:

Lo cierto es que es una verdadera sorpresa encontrarse con libros que hablen sobre el diseño escritos en español. Son pocos y menos de mano de diseñadores españoles. De entre todos ellos, el nombre de Enric Satué sobresale por encima del resto, no solo por su trabajo con los logotipos, el márketing y la publicidad de masas, sino como divulgador escritor sobre teoría del diseño. 

En este último libro, cuarto de una saga preceida por "El diseño gráfico" (1988), "El diseño gráfico en España" (1997) y "El factor diseño" (2011), reúne 48 nombres de destacados diseñadores del último siglo que le han inspirado y servido como modelo de aprendizaje en su carrera personal. El hilo conductor de todos estos nombres es la relación personal que ha mantenido con ellos, algunos mediante cartas, otros mediante congresos esporádicos sobre diseño en distintas capitales de todo el mundo; otros, de manera casual e inesperada; otros, por ser compañeros de oficio en determinados proyectos. En definitiva, un libro "homenaje" que destaca algunas de las principales figuras del diseño mundial y explora los factores de su éxito. 

La tónica general y la estructura del libro pretende ser amena y casi discursiva. En apenas dos o tres páginas de texto, Satué destaca los logros de cada diseñador, comenta alguna anécdota que conoce sobre los mismos (generalmente de cuando se conocieron) y rellena con palabras banales el resto del capítulo. A pesar de ser notoria una clara descompensación cuando el autor maneja términos del diseño (claros, pulcros, precisos y sin banalidades), se pierde en un rosario de expresiones chapuceras y mal hilvanadas cuando tiene que forrar de literatura el capítulo. Con todo ello, el libro no desmerece su lectura, a pesar de reunir varios cientos de fotografías a color que acompañan los ejemplos artísticos que se mencionan en cada autor.

En cuanto a las biografías citadas, sin poder hacer mención de todas ellas, caben destacar unas pocas. Tal vez la de Alberto Corazón sea la que está escrita más desde el cariño y la admiración por parte de Sauté. Llega a considerarlo poco menos que un "punk" del diseño, alguien que si bien no tenía una formación y una trayectoria propias dentro del diseño gráfico, supo virar, en determinado momento de su vida, su pasión al diseño. Desde entonces, especiamente desde los años 80 hasta hoy día, su impronta ha sido tremenda en la cultura visual y de masas de la sociedad española. Desde el logotipo de la Biblioteca Nacional de España, pasando por el de Renfe/Cercanías al de la Universidad Nacional a Distancia (UNED), todos ellos son muestras del genio creador de Alberto Corazón.

Otro ejemplo: Milton Glaser. Para la mayoría, este nombre no le dice nada en especial. Sin embargo, es el creador del famoso logotipo para la ciudad de Nueva York de "I Love New York", que lleva décadas recorriendo el mundo e imitándose por el resto de ciudades. O también podemos hablar de Saul Bass, otro diseñador gráfico estadounidense que dio un vuelco al diseño de los créditos de toda la cinematografía de Hollywood. 

En definitiva, un libro que, para el completo desconcedor de la historia del diseño gráfico, supone un aceptable repaso por su historia, sus logros e influencias en la cultura popular del siglo XX y XXI.

Antonio Sanz Egea