Errando en la jungla

Opinión:

Aquí los malentendidos y el sarcasmo son pan de cada día. Es un vértigo de acciones que hacen que te pierdas un poco a veces, sobre todo cuando la obra está escrita a dos voces y, casi al final, se entrelazan en un mismo capítulo de tal manera, que le da más intensidad a toda la trama.

Unos personajes muy diversos y sobre todo, bien descritos hacen que sea mucho más fácil visualizar las acciones y disfrutar mucho más de la lectura. Es una lectura por lo demás rápida, aunque el léxico que emplean algunos personajes -Facundo y su tío-, por ejemplo, pudieran ralentizar, en un principio la lectura, principalmente las constantes intervenciones sarcástico-eruditas de Facundo que siempre tiene necesidad de soltar, pero al cabo de unos párrafos acomodas el ritmo y disfrutas. Como si estuvieras viendo una peli de la "picaresca española" nada menos. Y muy bien hecho, no se ven obras como éstas hoy en día, ni personajes tan inverosímiles.

Por otro lado, está el ambiente y las circunstancias, nos retrotrae a otra época definitivamente, aunque nos fija en la nuestra con algunos elementos - internet, móviles, páginas webs- lo que hace una mixtura muy interesante, parece una historia fuera de su tiempo, en un ambiente congelado por el tedio de la vida cotidiana, y que la zozobra de la muerte del vecino viene a remover un poco.

Aunque la novela gira en torno a las vicisitudes de Facundo, podemos vislumbrar una gran cantidad de personajes que le dan al relato mayor peso y verosimilitud. Incluso en estas zonas donde la inocencia de los participantes choca de bruces con la verborrea del tío con toda su "picaresca". Es una trama interesante, sin duda alguna. Te hace ver cosas que no existen si no les prestas atención, pero ahí están, haciendo ruido y llamando tu atención, como la necesidad del dinero fácil y la creatividad a la ahora de engañar a tu prójimo... y de éste de dejarse engañar.

Dentro de todo, con su vocabulario y sus acciones, la novela se alza como un ejercicio de pensamiento lúcido a través del sarcasmo, la intriga y el humor negro. para decirnos que nos espabilemos un poco, que nos puede pasar algo parecido. O no. 

Esto de vivir por encima de tus posibilidades tiene lo suyo.

Carol Inabé Barba