Entrevista a David Lozano por "La Puerta Oscura III. Réquiem"

A David Lozano lo entrevistamos cuando comenzó la trilogía de La Puerta Oscura, con sólo el primer título publicado ("El viajero"). El interés era obvio y sólo hay que ver el éxito que ha tenido para comprobar que hicimos bien. Hace poco ha cerrado la trilogía, tras "El mal" se publicó "Réquiem" y ahora sus lectores queremos saber más.

Un autor que, como él, ha sabido utilizar el ambiente gótico que tanto atrae al público joven (y no tan joven, yo soy muestra de ello) en una contemporaneidad de la que te sientes parte, proporcionándonos aventura, momentos de terror y sentimientos encontrados, no puede dejarnos con la palabra FIN y cerrar tapa. Por eso hablamos de nuevo con él, porque él se lo merece, porque su obra lo merece y porque nosotros, sus lectores, lo merecemos.

ENTREVISTA

Has finalizado la trilogía y el tercer volumen lleva unos meses en el mercado ¿cómo está siendo la acogida de fans y críticos?

Lo cierto es que muy buena. Tanto por parte de la crítica como de los lectores los correos y comentarios que voy recibiendo son en general muy positivos. El único tema algo más conflictivo es el de la muerte de algún personaje, eso siempre supone un asunto delicado con los lectores, aunque a mí me encanta que determinadas escenas de la trama provoquen al lector; eso demuestra que la historia se vive, se sueña.

Tienes una relación directa con tus lectores ¿han aceptado el final que has propuesto o te han hecho alguna observación?

Se trata de un final que los lectores están aceptando bastante bien, y eso que hay determinados aspectos -no voy a concretarlos, por supuesto- que pueden resultar polémicos. En algún caso sí he recibido alguna crítica más dura, pero insisto en que incluso eso es un buen síntoma. Lo prefiero así que no una lectura apática que no reaccione.

Vamos a entrar por la Puerta… ¿requerirá sangre?

Todo tiene un precio. Y el coste del privilegio de poder traspasar la frontera entre la vida y la muerte es alto…

Desde la entrada de la antepasada de Jules la puerta sólo se ha abierto provocando el terror ¿es la moneda que hay que pagar por tener el privilegio de traspasar fronteras?

La existencia de una puerta que comunica los dos mundos no sólo ha ocasionado caos y terror, también ha provocado consecuencias positivas, incluyendo la etapa protagonizada por Pascal. Los Viajeros, en principio, emplean su rango para hacer el bien e incluso ayudar a espíritus hogareños que aún no han podido descansar en paz. Pero, como siempre ocurre con el manejo de grandes poderes, el riesgo es muy alto. Tal vez nuestra sociedad no está preparada para algo así…

Imaginé, dado que la Colmena de Kronos volvía a ser protagonista, que aparecería la época del holocausto… no ha sido así ¿cómo elegiste tus infiernos?

Debo reconocer que Auschwitz estuvo en mi cabeza como posibilidad de etapa dentro de Kronos. Pero al final, al tratarse de un episodio histórico tan empleado ya y con "El niño del pijama de rayas" tan reciente, preferí descartarlo y escoger otro.

La elección de esos momentos no fue un proceso complicado, por desgracia los hay a montones en nuestros siglos de turbulenta historia. Yo mismo pensé en unos cuantos, algún amigo también aportó los suyos e incluso el equipo editorial también opinó. Después yo opté por los que consideré que podían dar más juego en la trama o ser más sugerentes.

¿Qué otros infiernos ha provocado el hombre y podrían haber sido entradas factibles en la Colmena de Kronos?

Sólo en el siglo XX hay tantas posibilidades…: La limpieza étnica de hutus por parte de los tutsis en Uganda, las atrocidades que hacía el rey Leopoldo II de Bélgica en el Congo a principios de siglo, el brutal exterminio de armenios llevado a cabo por los turcos (todavía pendiente de reconocimiento oficial), la guerra de Vietnam, la dictadura de Pol Pot y los jemeres rojos en Camboya… Terribles testimonios de los extremos a los que puede llegar la naturaleza humana.

¿Eres consciente de que a pesar de hablar de infiernos, seres monstruosos, carroñeros, vampiros o esqueletos infectos lo que más miedo produce es que insinúes en más de una ocasión que ese infierno puede ser "perpetuo"?

Supongo que ocurre lo mismo que con el dolor. Al final, lo que mantiene viva la esperanza es ese horizonte de que, algún día, lo que nos hace sufrir debe acabar. Cuando ese horizonte desaparece… llega la desolación más absoluta. Y el pánico.

Tus personajes llevan unos cuantos años contigo ¿a quién echarás más de menos o por cuál tienes un especial cariño ahora que todo ha terminado y no volverán?

Jajaja, eso es como preguntarle a un padre cuál es su hijo favorito, algo que nunca debe hacerse. Lo cierto es que cada personaje tiene lo suyo, y con cada uno siento que he tenido una relación especial a lo largo de este tiempo. Si tuviera que escoger, aparte de Pascal como prota quizá me quedaría con Beatrice, Jules y Dominique. Aunque también he cogido mucho cariño a Marguerite, Daphne y Marcel. (Ya ves que te ofrezco una respuesta de lo más diplomática).

¿Tus lectores te cuentan cuál es su personaje favorito y por qué?

Sí, lo hacen. Aunque cada uno lleva a cabo su elección por razones distintas, en general la causa más frecuente es cierta identificación con el personaje. Determinado rasgo, físico o mental, hace que un lector se sienta más cercano a uno de los protagonistas, o porque comparte ese rasgo o porque lo admira.

David Lozano y Anika

¿Te has contenido cuando contabas alguna secuencia? (a cualquier nivel, de experiencia de terror, de relaciones personales, etc..)

He procurado hacerlo poco, me gusta que la historia fluya libremente conforme la voy visualizando en mi cabeza. De todos modos, sí es cierto que en algún episodio he procurado contener mi recreación porque resultaba a todas luces excesiva. El autor, aunque es libre a la hora de escribir, debe comprometerse a cierto nivel de fidelidad con la historia que construye. Y esa historia no siempre exige todo lo que se le ocurre al escritor.

David ¿eres miedoso?

Jajajaja. Bueno, lo soy un poco, y eso que me he metido en lugares bastante siniestros sin ningún problema y me encanta la noche como escenario. Cuando la documentación lo requiere… (un escritor tiene que vivir muchas experiencias para poder luego trasladarlas al papel). Hace algún tiempo participé en una autopsia, por ejemplo, y aguanté sin mayores problemas.

Dentro del género de lo inquietante lo que me asusta un poco, debo reconocer, es todo lo relativo a las posesiones infernales. Se trata de un ámbito que "me da mal rollo", como se suele decir. Prefiero no meterme mucho en eso.

A veces, cuando uno escribe sobre temas relacionados con la muerte, los fantasmas, los demonios…, le ocurre algo sin explicación y se plantea -aparte de llevarse el susto- que no está tan errado cuando habla de un más allá. ¿Te ha pasado?

Bueno, en realidad lo que me ha sucedido es que la gente me ha ido contando cosas aparentemente inexplicables, y eso sí te obliga a plantearte muchas cosas, sobre todo si escribes sobre ello. Además, como creyente considero que la muerte no es un punto y final, así que en mi caso resulta muy coherente pensar en ese "Más Allá".

Una de las anécdotas misteriosas que me contaron la trasladé a la novela -con permiso de quien la había vivido-, porque me pareció muy sugerente.

Has cerrado trilogía, dejas atrás el más allá, los carroñeros, los fantasmas, vampiros… ¿qué será lo próximo? ¿Estás trabajando en algo?

Sí, ya he empezado a trabajar en un proyecto de novela que tuve que aparcar mientras me dedicaba a La Puerta Oscura. Y hasta aquí puedo leer al respecto, jajaja.

Aparte de eso, parece que va saliendo adelante el proyecto para adaptar al cine la trilogía, y yo figuro en el equipo de guionistas.

Y aún tengo en la cabeza otros proyectos, así que no me va a sobrar el tiempo este año 2010…

David, sólo me queda agradecerte esta segunda entrevista y desearte éxito en tus nuevos proyectos. Un abrazo.

No hay de qué, para mí siempre es un placer hablar contigo. Muchas gracias por ese deseo, que te transmito a ti para tus propios desafíos de este año (te lo mereces). Ojalá nuestros mutuos retos nos permitan seguir compartiendo charlas y encuentros.

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