los guardianes del tiempo

Opinión:

La trama de Los Guardianes del Tiempo se desarrolla principalmente en España y Rumanía, entre junio y diciembre de 1989. La apertura a Occidente de los países comunistas, propiciada por la política de Gorbachov, no hace sino aislar a Rumanía, cuyos dirigentes, los Ceaucescu, están empeñados en mantener a toda costa. La novela es un retrato de aquellos meses, dotado de gran realismo y documentado con esmero.

En España, la joven que trabaja para el CESID tiene como tapadera un empleo con Adolfo Suárez y el autor también recrea, aunque con menos detalle, una época de nuestra propia historia.

Juan Pina, además, traslada al lector al Antiguo Egipto para dotar de verosimilitud a su historia, aprovechando las figuras de Akhenatón y Nefertiti y la religión monoteísta que trataron de implantar, y que no les sobrevivió.

Y luego está la Orden, la encargada de proteger las enseñanzas contenidas en el misterioso arcón desde la Antigüedad, una hermandad secreta, compuesta por personajes relevantes de la vida política, económica y académica de todo el planeta.

Con todos esos ingredientes, el autor desarrolla una trama bien estructurada, aunque un tanto previsible. El ritmo es ágil y, pese a la extensión de la novela, consigue mantener el interés del lector, con unas notas a pie de página que ahondan en los sucesos y en los personajes y que en ocasiones proporcionan información aún más interesante que la de la novela en sí misma, no exenta de curiosidades históricas.

Pero la novela no es sólo una sucesión de escenas llenas de acción, es también una reflexión acerca de algunos de los males de nuestro tiempo, entre ellos la soberanía del individuo y la supremacía de la razón sobre cualquier otra consideración, especialmente religiosa.

Los Guardianes del Tiempo es una mezcla de thriller político y novela histórica, con múltiples escenarios y grandes dosis de intriga, suspense y acción.

Pilar Alonso